29/8/09

Digo que estoy viva.
Para siempre.
Camino sin sentir las manos ásperas
por un rato.
Creería cualquier historia que en este momento
me contaras.
Y quién podría atreverse a decir que no es cierto.

28/8/09

Te busco, hola, hola, te estoy buscando, te busco. No me pidas que explique, sólo obedezco a una fuerza que está en mí y que cada vez puedo sentir mejor y más claramente.

Escucho tu nombre.
Te estoy buscando.
Abro un paraguas en medio de la tormenta.

Para ser sincera, me gustaría encontrarte en el camino algún día. Y también me gustaría que supieras que me gustaría encontrarte en el camino algún día sin que yo te dijera que me gustaría encontrarte en el camino algún día.

Pero esas cosas, ya sabemos, pasan sólo en los mejores sueños o en las peores películas.
¿Será cierto que las gotas no duelen?


De momento, lo único que puedo agregar es que le queda poco tiempo al paragüitas.

11/8/09

Me molesta, me molesta, me molesta.

No entiendo por qué tengo que ocultar que me siento sola. ¿Por qué tengo, por qué tenemos que disimular? Me siento sola. Y es en estos momentos que se me da por pensar que no debo ser la única, que tanta gente debe estar sintiéndose igual, porque vivimos tan mal, si por un momento nos permitiéramos salir de nuestras computadoras, de nuestras casas, de nuestra rutina, de nuestro espejo. Si por un momento vos y yo dejásemos de mirar para otro lado. Qué me importa que sea un cliché. Partiría en pedazos mi rutina de viajes y horarios y obligaciones, si tan sólo fuera por. No creo en el destino, pero me divierte encontrar casualidades. Me gusta sentir que las cosas valen la pena. Y me gustaría no estarme equivocando cuando pienso que la vida no puede ser este conjunto de actividades que llevo a cabo diariamente. La vida quizás sea más o quizás sea menos, pero no esto, no esto.

En fin.

Lo que más me molesta es ese callar tanto lo que sentimos, porque no soy la única, de eso estoy segura. ¿Cuándo llega el momento de vivir, de contar, de decir? ¿Cuánto más hay que esperar?