14/10/10

Vení, no sigas de largo. Quedate un rato. Yo justo estaba por hacer un té, ¿no venís? Hoy dejo todo esto. Esta casa, de este barrio. Entre otras cosas tendré que barrer la mugre y limpiar los manteles, sacar al sol los recipientes, ah, y apagar las luces. Y cerrar la puerta. Porque me voy. Hay que acordarse de cada llave. La vecina dijo que... Pero no importa, qué digo? vení un rato, todavía hay tiempo. Charlemos de algo. Contame en qué andás, qué pensás del otoño, qué vas a cocinar hoy de noche. No te preocupes, claro que no voy a olvidarme de cerrar las cortinas. Todo esto va a quedar solo, mudo. Vení, llenémoslo de voces por última vez. Hagamos que este lugar nos recuerde. Dale. Convidame tu tristeza o tu alegría. No sigas de largo.

No hay comentarios: